Esta no es una buena semana para Cesc Fàbregas. Además
de la derrota ante el Bayer Múnich, el futbolista del Barcelona se ha
visto en medio de un divorcio polémico y millonario que está llenando
las portadas de la prensa británica. Su
actual pareja Daniella Semaan y madre de su niña nacida el pasado día
10, está inmersa en una batalla legal con su exmarido que ha llegado a
los tribunales.
Semaan, de 38 años, y Elie Taktouk se divorciaron el
pasado año y, como parte del acuerdo, el juez dictaminó que se debía
vender un lujoso piso que compartían en Londres, valorado en 7 millones
de libras (8,3 millones de euros), según informa The Times. De los
beneficios, 1,4 millones de libras (1,7 millones de euros) debían ir a
parar a manos de Semaan para que pudiera comprarse una nueva propiedad.
Ella sostiene que vive habitualmente en la capital británica, si bien
visita Barcelona con frecuencia. Otras fuentes, sin embargo, aseguran
que desde que se emparejó con Cecs, Semaan se ha instalado en Cataluña
donde ha dado a luz a su niña.
Pero Taktouk no está conforme con el acuerdo y ha
alegó en un tribunal que el futbolista no solo se hace cargo de Semaan
cuando visita Barcelona, sino que también financia su vida en
Inglaterra. La libanesa es madre, además de dos hijos con su exmarido.
El asunto parecía zanjado cuando una compañía
controlada por el jugador catalán hizo una oferta por el piso en disputa
de 5,4 millones de libras (6,4 millones de euros), indica el periódico
británico.
Taktouk interpuso entonces un recurso ante la Corte de
Apelaciones de Londres al considerar que eso era parte de un plan
destinado a que su exmujer se quedara con el piso mientras se embolsaba
un beneficio millonario adicional.
El abogado defensor de Taktouk, Stephen Lyon,
argumentó ante la Corte que el juez habría dictado otro veredicto si
hubiera sabido los planes del exjugador del Arsenal y actual
centrocampista del Barcelona, señaló The Times.
"Parece bastante extraordinario que, menos de tres
semanas después de la sentencia, Cesc estaba ofreciendo comprar el piso a
través de esta empresa", dijo el letrado en declaraciones recogidas por
el diario.
Ante el tribunal, Semaan se defendió diciendo que, si
bien se puede garantizar que Fàbregas cuidará de la niña que tienen en
común no se puede asegurar que esté dispuesto a mantenerla
económicamente a ella a largo plazo.
El juez de la Corte de Apelaciones se mostró de acuerdo
con la libanesa y desestimó el recurso de Taktouk ya que "aunque la
compañía que controla Cesc comprase la antigua vivienda matrimonial,
ésta no sería ya propiedad de la esposa". "Ella sólo vivirá allí con el
permiso del señor Fábregas", sentenció el juez. No obstante, Taktouk
presentó otro recurso para bloquear la venta del piso que se analizará
en otra sesión judicial dentro de unas semanas.
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